Secaba la única taza que quedaba en la casa. Esa misma taza en la cual bebió, lavo, y ahora estaba secando; le hizo recordar que tan solo un tiempo atrás estaba con ella. En ese mismo lugar, y bebiendo un café seguramente. Después de cenar siempre tomaban una taza de café, y el lo hacia en esa misma que ahora estaba secando. Era su taza. La de ella, ya no estaba.
Termino de secarla, guardo la taza en la alacena, y se fue a acostar. Mañana la usara para desayunar.
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